Es mi opinión
Javier Alberto Gutiérrez Vidal
De acuerdo con la Real Academia de la Lengua Española, la corrupción se define así: “En las organizaciones, especialmente en las públicas, practica consistente en la utilización de las funciones y medios de aquellas en provecho, económico o de otra índole, de sus gestores.”
Y quiero partir de esta definición para explicar la evidente intención del presidente López Obrador y su 4T para, recurriendo a la manipulación, trafico de influencias y hasta a un fraude a la Constitución Política de los Estaos Unidos Mexicanos (Constitución), para lograr, si o si, completar lo que anunciaron como su Plan C.
Recordemos que, en el año 2023, cuando la 4T no logro avanzar con sus propuestas de reforma a las Constitución por no lograr la mayoría calificada necesaria para ello, el mismísimo presidente López, cual líder partidista, anunció que tenían un Plan C, consistente en lograr la mayoría calificada en la conformación de las Cámaras de Diputados y Senadores en las elecciones del 2 de junio de este 2024 y así lograr sus reformas constitucionales. Ese fue el principal tema ofrecido y anunciado por los partidos y los seguidores del presidente como tema de campaña.
Por los votos de los mexicanos que acudimos a las urnas el día de la elección, Morena y sus aliados obtuvieron el 54% de las preferencias ciudadanas lo que no les otorga los votos necesarios en el Poder Legislativo, sin embargo, con artimañas y cambios de asignación partidista de sus candidatos una vez pasada la elección, se pretende lograr obtener el 70% de las curules y escaños en las Cámaras de Diputados y Senadores, respectivamente.
Apoyados en una laguna en la ley de la materia, y queriendo hacer a un lado la claridad del articulo 54 de nuestra Constitución, han iniciado una campaña jurídica y de cabildeo con las autoridades electorales no solo por parte de los dirigentes partidistas, sino hasta de la oficina del presidente y directamente de la Secretaría de Gobernación para lograr la llamada sobrerrepresentación de algo que no se tuvo en las urnas.
¿Y para que quieren lograr este porcentaje en las Cámaras?
Pues con esa mayoría apócrifa podrían lograr el control total de los tres Poderes de la Nación. Con mayoría calificada lograrían hacer todas las reformas a la Constitución que quieren, someter al Poder Judicial mediante el nombramiento de Jueces, Magistrados y Ministros mediante el voto popular, a mejor entendimiento diremos que “a quienes el presidente quiera”.
Con esas reformas estarían desapareciendo los órganos autónomos que hasta hoy han servido a los mexicanos en diferentes materias y con ello se atentaría al ejercicio de los derechos humanos en México.
Por ejemplo, ya esta en la mira la desaparición del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), organismo autónomo que garantiza nuestro derecho a conocer lo que hace o no hace el gobierno, cuanto gasta, quienes son sus proveedores, que procedimientos son utilizados para el gasto público, cual es la nómina, cuánto ganan los funcionarios, etcétera, pero que además es el órgano que protege el uso de nuestros datos personales en posesión del gobierno.
Así mismo, están en la mira cuatroteista el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) que tiene como objetivo principal promover el desarrollo eficiente de las telecomunicaciones y la radiodifusión; el Consejo Nacional de Evaluación de Desarrollo Social (CONEVAL) que establece lineamientos y criterios para la definición, identificación y medición de la pobreza, garantizando la transparencia, objetividad y rigor técnico de las políticas públicas en la materia; la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación que tiene como atribución constitucional la realización de estudios, investigaciones y evaluaciones para la mejora de la educación en México; y, la Comisión Nacional de Hidrocarburos, que administra técnicamente las asignaciones y contratos para la explotación y extracción de hidrocarburos, entre otras cosas.
Además, peligra la existencia del Instituto Nacional Electoral (INE) y los órganos electorales locales, así como el Tribunal Electoral de la Federación (TRIFE), y con ello la democracia en México.
Es mi opinión, que de completarse la mayoría calificada de la 4T en el Poder Legislativo por esta vía por demás ilegal e irregular, el presidente López y su movimiento estarían burlando no solo a la Constitución, sino a la democracia mexicana, pues estarían obteniendo una sobrerrepresentación mayor a la otorgada por los ciudadanos y con ello escribiendo su Plan C con C de corrupción. Así seguirán escribiendo su historia con c de cuarta y C mayúscula de corrupción.
Queda todo en manos de las autoridades electorales, o hacen valer la Constitución o ceden ante la presión del poder público traicionando al pueblo de México que tanto ha confiado en ellas y hasta ha salido a las calles a defenderlas.
*El autor es mexicalense, Licenciado en Derecho, Diputado Federal en la LVI Legislatura, con experiencia en la función pública en los tres órdenes de gobierno. Contacto: javiergutierrezv@hotmail.com
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